Leído en Otra iglesia es imposible proveniente de Zoon Phonanta
Marginalia
A veces las notas son feroces,
asaltos virulentos contra el autor
en diminuta letra negra
desde los bordes de cada página.
"Si pudiera ponerte las manos encima,
Kierkegaard, o Conor Cruise O'Brien",
parecen decir,
"cerraría la puerta y te sacudiría la cabeza con algo de lógica".
Otros comentarios son más informales, desdeñosos:
"Estupideces" "¡Por favor!" "¡JA!",
ese tipo de cosas.
Me acuerdo que una vez, alzando la vista de mi libro,
con el pulgar como señalador,
traté de imaginar qué clase de persona
había escrito: "No seas bobo"
al costado de un párrafo de La vida de Emily Dickinson.
Los estudiantes son los más humildes,
simplemente dejan sus huellas esparcidas
al borde de la página.
Uno garabatea "Metáfora" junto a una estrofa de Eliot.
Otro señala la presencia de "Ironía"
cincuenta veces en los párrafos de Una modesta proposición...