James Wright / Jámpster
Traducciones: Poemas de James Wright / Versión de Diego L. Garcíaen
https://jampster.cl/traducciones-poemas-de-james-wright/ Po Chu-i, calvo y viejo político,
¿de qué sirve?
Yo pienso en ti,
entrando con dificultad en las gargantas del Yangtsé,
cuando eras conducido por los rápidos
hacia uno u otro de tus trabajos
en la ciudad de Changshou.
Lo hacías, supongo,
en la oscuridad...
por Pablo Santiago Chiquero
Dice el poeta James Wright (Ohio, 1927-Nueva York, 1980), uno de los nombres más importantes de la lírica norteamericana de la segunda mitad del siglo XX, en esta entrevista en The París Review: "Los hombres somos una parte infeliz de la naturaleza, quizás simplemente naturaleza que se ha vuelto consciente de sí misma. ¡Oh, cómo me gustaría ser un pájaro, un carbonero por ejemplo! Pero no puedo ser un carbonero, todo lo que puedo ser es lo que soy. Amo el mundo natural y soy consciente del dolor en él. Así que soy un poeta de la naturaleza que escribe sobre los seres humanos en la naturaleza“. La cita no es banal, pues despeja mediante palabras del propio autor una de las claves del poemario No se quebrará la rama, recientemente publicado por Vaso Roto Ediciones. Wright, premio Pulitzer por sus Collected Poems, confiesa su interés por escribir "sobre los seres humanos en la naturaleza", y eso es precisamente lo que encontramos en las páginas de este poemario descriptivo y detallista, el más cercano a la naturaleza de los que escribió el poeta, y que podemos leer en español gracias a la lograda traducción de Antonio Rivero Taravillo. En los versos de Wright encontramos una constante contraposición entre el hombre y la naturaleza, entre el tiempo humano y el tiempo, en apariencia imperturbable, del mundo, entre el paisaje inalterado de los bosques, prados y montañas y los paisajes tristones y melancólicos –estaciones de tren, cuencas mineras, cementerios–que genera la actividad del hombre.
"Muchos animales que nuestros padres mataron en América
tenían ojos vivaces.Salvajemente escrutaban en derredor, al oscurecerse la luna.La luna nueva cae en los depósitos de mercancias de las ciudades del sur, pero que las oscuras manos de Chicago pierdan la lunano importa a los ciervos en este prado norteño“.
Como seres arrancado de la naturaleza, nos dice el poeta, solamente nos queda mirar salvajamente alrededor, añorando esa comunión perfecta con el mundo que una vez tuvimos, y que hoy pertenece a los animales. Sí, la naturaleza pone en evidencia nuestra propia fugacidad en este mundo, pero también es ella la que nos entrega imágenes cotidianas de belleza sin las que la vida sería difícilmente soportable. Porque, ¿quien no ha visto alguna vez esta escena?
"En un pino,
a poca distancia de mi alfeizar, un arrendajo azul brillante salta y cae, salta y caeen una rama.Me río cuando lo veo abandonarse a un completo goce, porque sabe tan bien como yoque no se quebrará la rama“.
Acostado en una hamaca en la granja de William Duffy en Pine Island, Minnesota
Por encima de mi cabeza veo la mariposa de bronce,
dormida en el negro tronco,
agitarse como una hoja en la sombra verde.
Bajando el barranco que hay detrás de la casa vacía,
los cencerros se siguen el uno al otro
hacia las distancias del atardecer.
A mi derecha,
en un prado iluminado por el sol entre dos pinos,
los excrementos de los caballos del año pasado
llamean convertidos en piedras doradas.
Me reclino mientras la tarde se oscurece y avanza.
Un pollo de halcón flota en lo alto en busca del hogar.
He malgastado mi vida.
Versión de Jonio González
Imagen: www.poets.org.
El otoño comienza en Martins Ferry, Ohio
En el estadio de la secundaria Shreve
yo pienso en los polacos acunando porrones de cerveza en Tiltonsville,
en las caras grisáceas de los negros en los altos hornos de Benwood,
y en el sereno herniado de la Wheeling Steel
que sueña con los héroes.
Todos los padres orgullosos tienen vergüenza de volver a casa,
sus mujeres cloquean cual gallinas famélicas
y se mueren por recibir amor.
Por eso
es que sus hijos cobran una belleza de suicidas
al comenzar octubre,
y galopan terriblemente el uno contra el cuerpo del otro.
Traducción: Ezequiel Zaidenwerg en http://zaidenwerg.blogspot.com.ar/2011/01/el-otono-comienza-en-martins-ferry-ohio.htmlImagen: enote.com
Bendición
Justo en la salida de la autopista a Rochester, Minnesota,
brinca suavemente la luz del crepúsculo en la hierba.Y los ojos de esos dos ponis indiosse oscurecen con afabilidad.Han salido gustosos de entre los saucespara recibirnos a mi amigo y a mí.Saltamos la alambrada hasta el pradoen el que han pastado todo el día, solos.Se tensan, apenas refrenan su alegríapor nuestra llegada.Se inclinan vergonzosos como cisnes húmedos. Se quieren.No hay soledad como la suya.De nuevo a sus anchas,comienzan a ronzar los brotes primaverales en lo oscuro.Quisiera abrazar a la más fina,que ha venido a mi encuentroy me ha acariciado la mano con su hocico.Es negra y blanca,le caen las crines sueltas por la frente,y la leve brisa me invita a acariciar su larga oreja,delicada como la piel en la muñeca de una muchacha.De pronto me doy cuentade que si yo saliera de mi cuerpoflorecería.De: The Branch Will Not Break, 1963Traducción: Natalia CarbajosaImagen: redroom.com
A Blessing
Just off the highway to Rochester, Minnesota,
Twilight bounds softly forth on the grass.
And the eyes of those two Indian ponies
Darken with kindness.
They have come gladly out of the willows
To welcome my friend and me.
We step over the barbed wire into the pasture
Where they have been grazing all day, alone.
They ripple tensely, they can hardly contain their happiness
That we have come.
They bow shyly as wet swans. They love each other.
There is no loneliness like theirs.
At home once more,
They begin munching the young tufts of spring in the darkness.
I would like to hold the slenderer one in my arms,
For she has walked over to me
And nuzzled my left hand.
She is black and white,
Her mane falls wild on her forehead,
And the light breeze moves me to caress her long ear
That is delicate as the skin over a girl’s wrist.
Suddenly I realize
That if I stepped out of my body I would break
Into blossom.
The Branch Will Not Break, Wesleyan University Press, 1963
Deprimido por un libro de mala poesía, echo a andar hacia un prado silvestre e invito a los insectos a reunirse conmigo
Aliviado, dejo caer el libro tras una roca.Asciendo una ligera cuesta de hierba.No quiero molestar a las hormigasque recorren en fila india el poste del cercado,portando pequeños pétalos blancos,lanzando sombras tan precarias que puedo ver por ellas.Cierro los ojos un instante y escucho.Los viejos saltamontesestán cansados, saltan pesadamente,tienen sobrecarga en los muslos.Me gustaría oírlos, los sonidos que emiten son claros.Se han ido a dormir.Delicioso y lejano, entonces, un oscuro grillo les relevaen los castillos de arce.JAMES WRIGHT (1927, Ohio / 1980, New York, Estados Unidos de Norteamérica)De: http://jordidoce.blogspot.com/2009/11/james-wright-poema.html Imagen: liliputreview.blogspot.com