En el fondo de un pozocuya boca ha sido tapada desde afuerasin un resquicio que permita la entrada de la luzun hombre, solo, con una botella de agua.Debe meditar, si puede, sobre la impermanencia de las cosaspero en cambio elige adivinarse las uñas de los pies.Ha fracasado en todo: ni el amor,ni la pura poesía en estado salvaje,ni el ideal paupérrimo de una vida dedicada al arte.Tiene cuarenta años y no puede mirar hacia adelante,tampoco hacia atrás. (El pasadoes una cortina de humo sobre todas las cosas;su sola noción opaca los usos del presente,en cierto modo lo desanda.)En el fondo del pozo, el hombre,que es chino y está a punto de morir pero no (y él lo sabe),imagina que enciende un fósforo;siente en la yema de los dedos la asperezade la pólvora: el fulgor repentino que lo fascinó en su infanciaes ahora, en el pozo, un sueño sin dimensión.(Un fantasma sin cara, él mismo sin su aspecto.)En el fondo del pozo el hombre podría ser cualquiera,sumirse en la historia colectiva como quien cava una fosa común.Ser víctima o verdugo: ha perdido los límites. Desconoceel peso permanente que arrastra sobre sí.Él quisiera dejarse deslizar por la vía más fácil:hacer de sus sentidos afilados un aquí y un ahora.Pero sólo conoce aquello que lo espera: el hambre, la sed.Como un monje suicida o destinado a la automomificación,el hombre –que antes tuvo una esposa, a la que amaba–querría tener ahora, en el pozo, una campana.Una campana de tañido minúsculo para anunciar que todavía sigue vivo.En sus horas de miedo dice palabras sueltas, destajos de un poemaque no sabe o no quiere recordar. Pasa la yema del pulgar por los labios resecos.Supone que sería más fácil dejar de respirar.En el fondo del pozo el hombre quisiera ser juez de su propia vidae inclinar el platillo hacia el lado de los inocentes,los que sin más que su paciencia resignada esperanlas tramas infinitas.Pero sabe que de algún modo es culpablede estar allí sentado, solo,en la extrema oscuridad.
Teresa Arijón (1960, Buenos Aires, Argentina).
De "Poemas y animales sueltos", Buenos Aires, Pato-en-la-cara, 2005
"Óstraca" (poesía reunida), Buenos Aires, Curandera, 2011.
Enlaces relacionados con Teresa Arijón:
Valeria Cervero: 1972, Buenos Aires, Argentina. Publicó "Cadencias", 2011; "Escondidas", libro-álbum
ilustrado por Vivi Chaves, Ediciones del Eclipse, 2013; "El agujero negro
de lo dicho" (plaqueta), Colección Semilla, en prensa. Edita el blog
"mordiscos" (www.vc-mordiscos.blogspot.com).
Mundo grande
No, mi corazón no es mayor que el mundo.
Es mucho menor.
En él no caben ni mis dolores.
Por eso me gusta tanto narrarme.
Por eso me desnudo,
por eso me grito,
por eso frecuento los periódicos, me expongo crudamente en las librerías:
necesito de todos.
Si, mi corazón es muy pequeño.
Sólo ahora veo que en él no caben los hombres.
Los hombres están aquí afuera, están en la calle.
La calle es enorme. Mayor, mucho mayor de lo que yo esperaba.
Pero tampoco en la calle caben todos los hombres.
La calle es menor que el mundo.
El mundo es grande.
Tú sabes cómo es de grande el mundo.
Conoces los navíos que llevan petróleo y libros, carne y algodón.
Viste los diferentes colores de los hombres.
los diferentes dolores de los hombres,
sabes qué difícil es sufrir todo eso, amontonar todo eso
en un sólo pecho de hombre, sin que él estalle.
Cierra los ojos y olvida.
Escucha el agua en el cristal,
tan calma. No anuncia nada.
Entre tanto se escurre en las manos
¡tan calma! Va inundando todo.
¿Renacerán las ciudades sumergidas?
¿Los hombres sumergidos, volverán?
Mi corazón no sabe.
Estúpido, ridículo y frágil es mi corazón.
Sólo ahora descubro
cuán triste es ignorar ciertas cosas.
(En la soledad
desaprendí el lenguaje
con el que se comunican los hombres).
Otrora escuché a los ángeles,
las sonatas, los poemas, las confesiones patéticas.
Nunca escuché la voz de la gente.
En verdad soy muy pobre.
Otrora viajé
por países imaginarios, fáciles de habitar,
islas sin problemas, no obstante exhaustivas y convocando al suicidio.
Mis amigos fueron a las islas.
Las islas pierden a los hombres.
Sin embargo algunos se salvaron y
trajeron la noticia
de que el mundo, el gran mundo está creciendo todos los días,
entre el fuego y el amor.
Entonces, mi corazón también puede crecer.
Entre el amor y el fuego,
entre la vida y el fuego,
mi corazón crece diez metros y explota.
¡Oh vida futura! Nosotros te criaremos.
De: Sentimento do mundo, 1940
Traducción de Rodolfo Alonso
Enlaces relacionados con Drummond de Andrade: http://www.escritores.org/biografias/171-carlos-drummond-de-andradehttp://www.poesiasemanal.com/poesiasemanal/andrade.htmlhttp://www.materialdelectura.unam.mx/index.php?option=com_content&task=view&id=107&Itemid=1http://elpoetaocasional.blogspot.com.ar/2010/07/carlos-drumond-de-andrade.html
Catalina Boccardo: 1961, Buenos Aires. Publicó "El jardín santo", Ediciones en Danza, 2011 y "Territorios", Editorial del Dock, 2012. Tiene inéditos dos libros "Laguna naineck" y "Bailar". Edita el blog "Intercuerpos" en www.intercuerpos.blogspot y www.adestiempolanada.blogspot.com
Enlaces relacionados con Catalina Boccardo:
http://elpoetaocasional.blogspot.com.ar/search/label/Catalina%20Boccardohttp://unadepoetas.blogspot.com.ar/2012/03/catalina-boccardo-busco-los-extremos-de.html