Ella adujo
-Estoy interferido, es por eso-
musitó él
presa de confusión
-Ganado que hubo el más mejor
amado mío
sólo te resta
reconocer la derrota-
adujo
con sosiego exultante
la interferencia.
La falta de la sobra
No tiene pies ni cabeza
esto no tiene
ni pies
ni cabeza
Debe ser un sueño
Sin pies
ni cabeza
debe ser el sueño de un soñante
con predominio en pies
& cabeza.
Tan propia
Cuando no estoy en parte
alguna
me extrañás
vos
por esa condición
tan propia
de no faltar
jamás
de todas partes.
Las cuatro
Las cuatro verdades
de mi vida privada
con groseros recortes
por las cuatro tijeras
de mi vida pública:
como cuatro frescas
las cuatro tijeras.
No carecer
Aturde como todo
lo que aturde:
con carácter irreversible
para los que no
carecemos de carácter ni de
irreversibilidad
ni de pronunciada propensión
al aturdimiento.
Siga la flecha
Aquí, donde he llegado
no sé qué es
Sé que
sin saber a dónde
he llegado
he sabido
dirigirme.