Atávico
Contra el sueño triturador
contra el mapa inflexible con su belleza atroz
no inventas más que a tus atávicos fantasmas
llegados desde hace tiempo a la comarca pobre
habitantes del trigal salvaje
nacidos del vapor del día
del sorbo especial que entregan las noches fieras
Son ellos
los reconoces
con las siluetas ágiles
los grandes pozos de incienso y ceniza
desde donde te convocan
ingenuo
los seres cristalizados
lugareños de ti
antiguas armas que destruye el olvido que nunca germina
De: "La antorcha infinita", Rangún, 2021
Otro poema de MAXI SENKIW, aquí
Otro poema de MAXI SENKIW, aquí
"La antorcha infinita es una esperanza iluminada. La tentativa, el gesto posible, el arco que se tiende hacia la experiencia de la sustancia humana. La poesía es una sombra. Es decir, la proyección de algo oculto iluminado desde algún lugar. Escribimos entre sombras y a tientas, como palpando los asuntos y las cosas que se camuflan en esa proyección; una presencia que se escabulle, juega entre luces y murallas y demanda al aventurero pertrecharse de distintos artefactos para su itinerario. Una brújula, un péndulo, algún conjuro. Una antorcha. Tal vez ese conjunto de sombras ofrezca su tregua en alguna ocasión y habilite algo de la presencia que proyecta. La antorcha estará para iluminar y ahí ya no conjugará la escritura. Puede que el único lenguaje sea el silencio o una música que jamás escuché”. Maxi Senkiw