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Mateo Morrison


1     


Nunca he dicho que no temo a la muerte. 
Lo que sí puedo asegurar 
Es que como soy distraído 
No advierto con frecuencia su cercanía. 
Solo percibo después 
Lo próximo que ha estado. 
Miles de voces rondando mi existencia
Y yo ahí mirando a las muchachas,
Ahíto de naranjas,
O esperando por la llegada de algún poema
Con bolígrafo y papel a mano.
Ha sido en paz
También en guerra
He salido ileso tras sentir una bala rozando mi esqueleto
De un fuego que azotó un tercio de mis ropas
O de un avión que se incendia
En la ciega neblina.
No llegó el poema
Las muchachas miraron hacia otro lado
El avión hizo un aterrizaje perfecto



3




La daga que construyes para herirme. El cuchillo imantado
que lanzas a mi pecho.
La tea con que incendias mis pisadas. La herida en mí
descuidado rostro.
Las abejas que entrenas para emponzoñar mi espíritu.
Las aguas infectadas del jardín que cultivas para ensañarte
en mi cuerpo derribado.
El pistoletazo que buscaste en el poema de Maiakosky
para penetrar en mi sien.
Los restos de cicuta que indagas en la historia para que
su esencia destruya mis entrañas.
Las investigaciones que avanzas para aprender y aplicarme
las torturas más sublimes de la postmodernidad.
La cámara de gas que fuiste a conocer para estudiar
la posibilidad de mi holocausto particular.
La mirada que exhibes cada mañana forzando
a refugiarme en la quietud.
¿No son suficientes para detener tus asedios a mi sombra?



4




He aquí donde están colocadas las criaturas
que van a ser estatuas.
Entes tallados sin sudores
y sin nada que circule por sus venas.
Ya están listas lejos de las ciudades donde deambulan
tantos seres anónimos que nunca serán esfinges.
Trasladen ya a los seleccionados para la gloria
y déjennos con nuestra intrascendencia,
dispuestos a morir como llegamos,
emitiendo un pequeño grito.
Arropándonos con la sábana del olvido.



MATEO MORRISON FORTUNATO (1946, Santo Domingo, República Dominicana)
Fuente: Revista La Otra
Enlaces: Sitio oficial | Poesía dominicana | Festival de poesía de Medellín

Dos poemas de Soledad Álvarez

poesía domenicana, dos poemas. Al desnudo, Coda


Al desnudo    




Frente a ti han ido cayendo 
uno a uno los velos que me cubren, 
y el fulgor, la fábula arrebata que fui 
como flor de sal en el agua 
se han perdido. 
Mira la antípoda impía de lo que deseaste, 
bajo la luz que no tiene escudo ni vuelta 
mírame las astillas del hombro 
las uñas sin consuelo 
la almendra del vientre trocada en 
    cuesco exangüe, 
el sexo donde el deseo depositó su tibieza líquida 
una medusa prensada entre tablas. 
Desnuda estoy del desnudo que me disfraza 
mis ojos ya no son el fanal de tus viajes nocturnos; 
de mis senos no mana la lecha que te alimentaba
y en mis sienes no pastan furias ni caballos.
Ah las imágenes que perseguí y perdimos
la lumbre efímera, la imposible divisa destrozada;
pero al final del día mi corazón es la casa
       donde te acojo
sin velos, con dulzura de amapola.



Coda




Nada quedará de tu presencia
que no sea el recuerdo:
pedazos de imágenes
rastros que otras presencias desvanecerán.
Nada quedará de esta tarde:
ni la felicidad que comienza
con el ruido de las cucharillas en las tazas
      de café
entre paredes y platos descascarados
el sillón de mimbre a punto de sucumbir
     bajo el peso de los libros
la ropa sobre la cama
y tras la ventana el azul ondeante
agujereado por los árboles.
Mañana escribiré sobre la muerte de los amantes
y recuperaré entre todos los momentos
el que nos salvó del miedo y su deriva
el más limpio
cuando dijiste que el amor no contradice
la ausencia del amor
y tus ojos se humedecieron
y acariciaste mi espalda
con la delicadeza
del que se aleja de puntillas.





SOLEDAD ÁLVAREZ (1950, Santo Domingo, República Dominicana)
Fuente: Acento
Enlaces: Moño hecho | Poesía.us  | Revista Altazor 
Imagen en Youtube

Thaís Espaillat


Eres un pixel      




Perdón por decirte que me voy a dormir 
(porque la mayoría de las veces no lo hago) 
pero no porque no esté cansada 
 
no quiero seguir viendo tus palabras 
en un fondo blanco 
ni unos dibujitos 
con corazones en los ojos 
 
no quiero quedarme despierta 
para que lo último que vea 
sea tu cara cuadriculada, 
hecha un mangú de pixeles 

un reguero de colores sin sentido.
Igual que el cielo
que quieres que vea contigo.
Que ya ni siquiera puedo ver
por el edificio que me construyeron al lado.

Estoy harta
de oírte por bocinas,
por audífonos,
en mi cabeza cuando te leo

estoy harta
de que tu voz se corte
de que se vaya la señal
de depender de unas pantallas
de tres colores
de cuadros
de datos para que Facebook me venda mierda.

Quiero poder
oírte respirar

No quiero poder
explicárselo a nadie
Ni a mí misma
cuando te miro
y no te recuerdo.

Quiero encontrarte nuevo
cada vez que te vea,
y dibujar constelaciones
en los lunares
que te van apareciendo
para que los cuente.



Anuncio para el periódico




Róbenme el cuerpo,
por favor,
que ya no lo quiero.
No quiero este saco
de huesos,
de grasa,
de tendones,
cartílagos,
sangre,
            sangre,
                        sangre.

No quiero mirarme
llorando en el espejo.
¿Las nubes se miran
en los charcos cuando llueve?

Mis lágrimas no
son gotas de agua
Son sal y baba
y una cuchilla
coloreándome
los muslos.
Una grilla,
orden en el desorden,
un jalón para volver al mundo.



Yo soy tu Perestroika




Ahora que lo pienso
yo pude haber estado siendo
una espía rusa
todo este tiempo
una espía rusa
y no haberme dado cuenta
hasta ahora mismo que pienso en las camisas
que se han perdido de mi closet.
¿Será que alguien se venga de mí?

Recuerdo que un ruso
secuestró a mi papá hace unos años
¿Será que me hice espía rusa
no siendo ni rusa ni espía ni remolacha
para que devolvieran a mi padre a su cama?
Es posible,
porque todo termina siendo posible,
sólo hay que ver videos en internet
o escuchar cualquier emisora.

El mundo se acabará pronto
(lo puedo decir con confianza
porque ya me confesé:
soy espía y además soy rusa)
Se acabará pronto
y todos seremos mantequilla
manteca
bizcocho de ciruela
en una piedra que flotará
y flotará por los siglos de los siglos

¿Habrán devuelto a mi papá,
gente come papa come borscht,
gente bebe vodka bebe vodka
a su casa, todavía mi casa, todavía la casa de mi mamá?
Una piedra
marshmallows y mayonesa,
todos toditos,
sí, sí,
adiós.
Soy espía rusa y les juro que me di cuenta hoy.





THAÍS ESPAILLAT (1994 Santo Domingo, República Dominicana)

Norberto James Rawlings


Señal de identidad     




Me niego a habitar mi nombre en el nombre de mi padre 
y de mi propio espíritu que en él se guarece.  

Me niego a negar este rostro que como bandera enarbolo, 
esta voz que proyecto en el vacío de mis muertos, 
estos gestos que encarno    inmerso en estas raíces por las que me nutro y soy  

Me niego a negarme desasociándome de este mortal      que exhibe sus flaquezas. 

Me niego a volver la mirada destruir mis tambores, 
        impugnar mis dioses, ignorar mis colores. 
        Si a mi memoria erigieran monumento alguno, 
        que sea dolmen al amor que profesé, 
        no obelisco a la desidia o al desamor. 
   


En estas aguas



Hay en estas aguas
un lugar donde saltan delfines
y vagan mansos manatíes.
Un lugar donde se confirma el valor de la vida,
las formas del delirio,
las perplejas márgenes del miedo.
Allí reposan esencias del silencio,
envejecimiento del tiempo,
urgencia de ti
de que me completes
de que termines de forjar
esta sonora diadema de luz
que mi sed irá a calmar.



Extranjero



Ya no navega sonámbulo por los mares interiores
buscándote, amor.
No escudriña las rayas de sus manos,
por quién sabe cuál secreto
para encontrarte.
No le sirve ya la ciega guitarra,
el herido bandoneón,
ni el piano de derritiéndose en notas lastimeras.
¿Para qué este reloj gelatinoso?
¿Para qué paraguas si no llueve ni hace sol?
Hoy todo es diferente.
Tu silbante corazón envejece junto al mío,
ajado de distancia y espera.
Cascada de luz,
origen del asombro.
Dulce gozne de lo irreversible.



Norberto James RawlingsNORBERTO JAMES RAWLINGS (1945, San Pedro de Macorís, República Dominicana)
Fuente: www.artepoetica.net



Homero Pumarol




Caribbean Ants     



Uno se imagina el mar caribe 

Como un hormiguero que devora las Antillas  

Y las Antillas como botellas 

De distintos tamaños donde 
Se conserva todo el ron del mundo  

Y el mundo como una bolón 

Que vuela sobre los techos de Boston 

Y Boston es la imagen que muestran los satélites

Cuando el Big Papi trota lentamente por segunda,
Saludando a los blitchers, acariciando la media luna con los spikes
Y los spikes del Big Papi son unas yolas Puma

Donde viajan cuatro mil indocumentados

Burlando los radares de los guardacostas gringos hasta Borinquen
Y de Borinquen a Michigan o a Nueva York
Y todo el mundo tiene un primo en el Canal de la Mona
Y una mona es un gallo manilo que se usa para entrenar gallos de pelea
En Bayahíbe por ejemplo hay una gallera discoteca
Donde los gallos pelean bajo un discoball
Y los turistas bailan con espuelas salpicando plumas y sangre
Y los gallos apuestan a los turistas
Y los turistas se enamoran de los gallos
Y al final hay un gallo o un turista muerto
Y un turista que se casa con el gallo ganador.

Todo lo que tiene que ver con enormes olas de sanki pankis

Bajando por la espalda de una familia europea o gringa
Y con enormes olas de motores setenta
Subiendo carreteras de arroz y habichuelas
Entre hormigas caribe y botellas de ron.



Postcard




Lástima que no puedas ver el rompeolas 

Ni las gaviotas ni los pescadores negros del malecón
Ni los barcos con nubes en el muelle como en cualquier postal
O el café con vista al mar y ruinas de turistas fumando,
Bebiendo, comiendo por primera vez haitiano.
Aquí el tiempo pasa como se le antoja
A dos o tres políticos, un cura y un embajador.
Como hace tanto calor,
Lo que haya que hacer se hace borracho.
Igual que en cualquier provincia
Encontrarás mucha gente dispuesta a reconocer
La parroquia como el ave nacional y muchas mujeres solas.
Aquí cualquier puta te invita un café.
Por más que limpien las palmeras
Por más grandes que hagan los letreros
Cada año un coco mata un alemán. 



Homero PumarolHOMERO PUMAROL (1971, Santo Domingo, República Dominicana)
De. Revista Ping Pong
Imagen: festivaldepoesiaderosarioenfotos.blogspot.com






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