1.
con la chiquita prendida
a la teta
hermosa aún
como una manzana
y la segunda dormida
en el otro brazo
abrazada a un oso
que huele a jabón
repetís la tabla del nueve
para la mayor
y revisás
los cuadernos de la escuela
ponés el reloj
a las seis
y te metés en la cama
con la remera puesta
las medias
un libro de poemas
aunque te griten
revuelvas bolsillos
algo
o despedís a tu amiga
y la besás
-lloran un poco las dos-
cuando jurás
que es para siempre
te pagan una miseria
o tu cuerpo
no reza
ayuda ni amor
entonces
como matitas
cinco pétalos
tres colores
centro oscuro
del rojo al negro violeta
la cápsula de semillas
pensamientos
2.
la veo junto a la ventana de la rosa siria
corolas blancas enumeran los días
deshojan
vino sin los niños
sólo su panza bajo la ropa
es un varón
me duelen las piernas
faltan seis o siete semanas todavía
trae el pelo atado
no le digo que es bonita
como si hubiera otro lenguaje
para la necesidad
o un pudor
sobre algunas palabras
no preguntamos casi nada
cada una sabe
también en los sueños
como en su visita de anoche
y de qué otra manera
podría venir sonia
su quinto hijo
el corazón herido
la mudanza bajo la lluvia
heroica
hasta mi casa
tierra de iapinilke
cuando el silencio
es un globo
dentro de las nubes
y viene del mar
el cielo negro
nos gusta salir de casa
liebres de olfato brillante
buscando
un hueco entre los arbustos
cuevas abandonadas en la tierra
ese regocijo
de orejas largas
no queremos cobijo
si fuéramos sal
si fuéramos un puñado
puesto en agua hirviendo
si fuéramos azúcar
nos derretiríamos
dice una canción antigua
huimos
en el mareo
del cielo
la instantánea de colores
el arrebato
ya no hay aventura
que no sea ficción
el corazón
única reserva
de misterio
sus travesías
por el amor
o la violencia
ahora
cae granizo
regalo del domingo
interminable
los niños corren en lo blanco
no escuchan sus nombres
es la alegría
recién descubierta
la repentina primavera
del hielo
su gorjeo de pájaros
su deshacerse
que nos esperen
bajo los aleros nevados
chorreando agua el pelo
la risa de liebre
el abrazo
helado
violeta