MIRÁ los trenes
parece que siguen siempre un mismo ritmo
pero no
ahora corren los trenes
atraviesan desde ese riel los campos verdes
que van quedando atrás
y cada vez se ven más chicos
los pastizales con puntos amarillos
como en una pintura de Van Gogh
así en mi memoria las pinceladas
de los momentos en que pude
saborear lo dulce
y lo amargo
escandalosa y pudorosamente viva
mirá los trenes
son como la vida misma
se mueven y llevan en su interior
caras tristes o ilusionadas
entra un resplandor por las ventanas pequeñas
hasta que se hace noche y
se cierran
mirá los trenes
parece que siguen siempre un mismo ritmo
pero no
ahora van lentos
les pesa el viento en contra
esas bandadas de pájaros
y esos insectos que se estrellan
en los cristales
mirá los trenes
y escuchá el sonido cuando atraviesan
el campo
es como escarcha que lastima la piel
o como fuego
es como dos que se aman y como esa luz
que titila suave y se apaga
en el andén
LES dije que estoy triste
triste no
sensible dije
porque los amo y tengo miedo
tener miedo y estar así sensible son la misma cosa
es como si la muerte
me hiciera un guiño pensé
no quise decirlo pero lo pensé
les conté que me hice el eco stress y que el médico
me dijo “bastante bien”
yo le pregunté qué es “bastante” y sonrió
“bastante” fue una sonrisa enigmática
“bastante” para el doctor fue suficiente
estoy triste o sensible entonces el miedo
se cruza así de golpe
entre las horas doradas de la mañana
y la belleza del aire
se cruza en cada acto sencillo de los días
o de noche antes de dormir
no les conté que me despierto
y pienso que no quiero morir
también en los sueños el terror
la vida que se escapa
como una niña desamparada
grito “no no por favor no”
el miedo es un túnel que me lleva lejos
que me arrastra
¿hijos me escuchan?
no me crean demasiado
ustedes saben
que exagero
parece que siguen siempre un mismo ritmo
pero no
ahora corren los trenes
atraviesan desde ese riel los campos verdes
que van quedando atrás
y cada vez se ven más chicos
los pastizales con puntos amarillos
como en una pintura de Van Gogh
así en mi memoria las pinceladas
de los momentos en que pude
saborear lo dulce
y lo amargo
escandalosa y pudorosamente viva
mirá los trenes
son como la vida misma
se mueven y llevan en su interior
caras tristes o ilusionadas
entra un resplandor por las ventanas pequeñas
hasta que se hace noche y
se cierran
mirá los trenes
parece que siguen siempre un mismo ritmo
pero no
ahora van lentos
les pesa el viento en contra
esas bandadas de pájaros
y esos insectos que se estrellan
en los cristales
mirá los trenes
y escuchá el sonido cuando atraviesan
el campo
es como escarcha que lastima la piel
o como fuego
es como dos que se aman y como esa luz
que titila suave y se apaga
en el andén
LES dije que estoy triste
triste no
sensible dije
porque los amo y tengo miedo
tener miedo y estar así sensible son la misma cosa
es como si la muerte
me hiciera un guiño pensé
no quise decirlo pero lo pensé
les conté que me hice el eco stress y que el médico
me dijo “bastante bien”
yo le pregunté qué es “bastante” y sonrió
“bastante” fue una sonrisa enigmática
“bastante” para el doctor fue suficiente
estoy triste o sensible entonces el miedo
se cruza así de golpe
entre las horas doradas de la mañana
y la belleza del aire
se cruza en cada acto sencillo de los días
o de noche antes de dormir
no les conté que me despierto
y pienso que no quiero morir
también en los sueños el terror
la vida que se escapa
como una niña desamparada
grito “no no por favor no”
el miedo es un túnel que me lleva lejos
que me arrastra
¿hijos me escuchan?
no me crean demasiado
ustedes saben
que exagero
CELINA FEUERSTEIN (Buenos Aires, Argentina)