Mostrando las entradas con la etiqueta Blaise Cendrars. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Blaise Cendrars. Mostrar todas las entradas

Blaise Cendrars: Panamá o la aventura de mis siete tíos

El canal de Panamá, poesía francesa


A Edmond Bertrand, barman del Matachina    


Libros 
Ciertos libros hablan del Canal de Panamá 
Ignoro qué dicen los catálogos de las bibliotecas 
Y no escucho los periódicos financieros 
Aunque los boletines de la Bolsa sean nuestra plegaria 
cotidiana 
 
El Canal de Panamá se halla íntimamente vinculado a mi 
infancia... 
Yo jugaba bajo la mesa 
Disecaba moscas 
Mi madre me narraba las aventuras de sus siete hermanos 
De mis siete tíos 
Y cuando recibía alguna carta
¡Qué deslumbramiento!
Aquellas cartas de hermosas estampillas exóticas con versos
de Rimbaud como leyenda
Este día no me contó nada
Y me quedé muy triste debajo de mi mesa

También por aquel tiempo leí la historia del terremoto
de Lisboa
Pero estoy seguro
Que el crac de Panamá es de una importancia más universal.
Pues trastornó toda mi infancia.

Tenía un bello libro de estampas
Y veía por primera vez
La ballena
El nubarrón
La morsa
El sol
La Gran Morsa
El león el oso el chimpancé la serpiente de cascabel y la
mosca
La mosca
La terrible mosca
-¡Mamá, las moscas las moscas! ¡Y los troncos de los
árboles!
-duerme, duerme hijo mío
Ahasverus es un idiota

Tenía un bello libro de estampas
Un gran galgo llamado Durak
Una niñera inglesa
Banquero
Mi padre perdió las tres cuartas partes de su fortuna
Como tantas honradas gentes que perdieron su dinero en
aquel crac
Mi padre
Menos tonto
Perdió el de los demás,
Tiros.
Mi madre lloraba.
Y aquella noche me enviaron a dormir con la niñera inglesa

Al cabo de un largo número de días...
Debimos mudarnos
Y las pocas habitaciones de nuestro departamentito estaban
atiborradas de muebles
Ya no nos hallábamos en nuestra villa de la costa
Pasaba a solas días enteros
Entre los muebles amontonados
Hasta se podía romper la vajilla
Tajear los sillones
Demoler el piano...
Al cabo de un largo número de días
Llegó una carta de uno de mis tíos

¡El crac de Panamá hizo de mí un poeta!
Cosa sorprendente
Todos los de mi generación
También son muchachos
Que han sufrido peripecias extrañas
Ya no jugamos con los muebles
Ya no jugamos con trastos viejos
Nos embarcamos
Se cazan ballenas
Se matan morsas
Siempre se tiene miedo de la mosca tsetsé
Pues a nosotros no nos gusta dormir.

El oso el león el chimpancé la serpiente de cascabel me
enseñaron a leer...
Oh aquella primera carta que descifré solo más efervescente
que la creación entera
Mi tío decía:
Soy carnicero en Galveston
Los mataderos quedan a seis leguas de la ciudad
Y soy yo quien transporta los animales aún chorreantes de sangre, al atardecer, a lo largo de la playa
A mi paso los pulpos se yerguen en el aire
Mientras se pone el sol...
Pero había ahí algo más
La tristeza
Y la añoranza de su país.

Tío, desapareciste durante el ciclón de 1895
He visto después la ciudad reconstruida y he paseado a la
orilla del mar por donde tú llevabas las reses
ensangrentadas.
Una banda del Ejército de Salvación tocaba tras las rejas de
un kiosko
Me ofrecieron una taza de té
Nunca encontraron tu cadáver
Y al cumplir veinte años heredé los 400 dólares de tus
economías
También poseo la caja de bizcochos que te servía de
relicario
Es de hojalata:
Toda tu pobre religión
Un botón de uniforme

Una pipa cabila
Unos granos de cacao
Una docena de acuarelas pintadas por ti
Y las fotos de las bestias, los toros gigantes que llevas del
ronzal
Estás en mangas de camisa con un delantal blanco

A mí también me gustan los animales
Bajo la mesa
Solo
Jugaba entonces con las sillas
Armarios puertas
Ventanas
Mobiliario moderno-style
Animales preconcebidos
Que reinan en las casas
Como la reconstitución de las bestias antediluvianas en los
museos
¡El primer escabel es un uro!
Destrocé las vitrinas
Y arrojé todo aquello
La villa entera, como alimento a mi perro
Las estampas
Los libros
La mucama
Las visitas
¡Qué risa!

¿Cómo quieren que prepare mis exámenes?
Ustedes me han enviado a todos los pensionados de Europa
Liceos
Gimnasios
Universidad
¿Cómo quieren que prepare mis exámenes
Cuando pasa una carta bajo la puerta?
He visto
¡Hermosa pedagogía!
He visto en el cine el viaje que hizo
Tardó sesenta y ocho días en llegar a mí
Cargada de faltas de ortografía
Mi segundo tío:
Me he casado con una mujer que hace el mejor pan del
distrito
Mi vecino más próximo está a tres días de viaje
Ahora soy buscador de oro en Alaska
Nunca he encontrado más de 500 francos de oro en mi pala
¡La vida ya no se paga en su valor!
Tres dedos se me helaron
Hace frío...
Pero había ahí algo más
La tristeza
Y la añoranza de su país.
Oh tío, mi madre me ha contado todo
Robaste unos caballos para huir con tus hermanos
Te empleaste de mozo a bordo de un cargo-boat
Te quebraste una pierna al saltar de un tren en marcha
Y después del hospital, estuviste en prisión por haber
detenido una diligencia
Y hacías poesías inspiradas en Musset
San Francisco:
Allí leíste la historia del general Suter aquél que conquistó
California para Estados Unidos
Y que, ya millonario, se arruinó por el descubrimiento de
minas de oro en sus tierras
Largo tiempo cazaste en el valle de Sacramento, en donde
he trabajado roturando el suelo
¿Y qué ocurrió?
Comprendo tu orgullo
Comer el mejor pan del distrito y la rivalidad de los
vecinos 12 mujeres cada 1.000 kilómetros cuadrados
Te encontraron
Con la cabeza agujereada por un tiro de fusil
Tu mujer no estaba allí
Tu mujer volvió a casarse de nuevo con un rico fabricante
de confituras

Tengo sed
Santo Dios
De la gran puta
De la gran puta
Querría leer “El Avisar de Neuchâtel” o “El Correo de
Pamplona”
En medio del Atlántico no se está más cómodo que en una
sala de redacción
Giro en la jaula de los meridianos como una ardilla en la
suya
¡Vaya! he ahí un ruso de cabeza simpática
Adónde ir
Tampoco él sabe dónde dejar su equipaje
En Leopoldville o en la Sedyerah cerca de Nazaret, en lo de
mister Junod o en casa de mi viejo amigo Perl
En el Congo en Besaravia en Samoa
Conozco todos los horarios
Todos los trenes y sus correspondencias
Las horas de llegada las horas de partida
Todos los paquebotes todas las tarifas y todas las taxas
Me da lo mismo
Tengo algunas direcciones
Vivir de arriba
Regreso de América a bordo del “Volturno” por 35 francos
de Nueva York a Rotterdam

Es el bautismo de la línea
Las máquinas incesantes golpean con fuerza
Boys
Platch
Los baldes de agua
Un americano con los dedos entintados marca el compás
La telegrafía sin hilos
Se baila de rodillas entre las cáscaras de naranja y las latas
de conserva vacías
Una delegación visita al capitán
El ruso revolucionario experiencias eróticas
Gaupa
La mayor blasfemia húngara
Acompaño a una marquesa napolitana encinta de 8 meses

Soy el que conduce a los emigrantes de Kichinev a
Hamburgo
Fue por 1901 cuando vi el primer automóvil
Descompuesto,
En una esquina
Ese trencito al que los soleurinos llaman la plancha
Telefonearé a mi cónsul
Deme inmediatamente un billete de tercera clase
The Uranium Steamships Cº
No me den de menos por mi dinero
El navío está en el muelle
Desaliñado
Y las troneras abiertas de par en par
Dejo el bar como quien deja una sucia puta

En marcha
No tengo papel para limpiarme
Y salgo
Como el dios Tangaloa que al retirar la línea con que
pescaba sacó el mundo del fondo de las aguas
La última carta de mi tercer tío:
Ppeeere, 1º septiembre de 1887.
Hermana, mi muy querida hermana:
Soy budista y miembro de una secta política
Vine aquí para comprar dinamita
La venden en las tiendas de ultramarinos como entre
ustedes venden achicoria
En paquetitos
Luego regresaré a Bombay para volar a los ingleses
La cosa arde
Nunca más volveré a verte...
Pero había ahí algo más
La tristeza
Y la añoranza de su país.

Vagabundeo
Estuve preso en Marsella y a la fuerza me mandan de
regreso a la escuela
Todas las voces gritan a coro
Los animales y las piedras
El habla más hermosa es la del mudo
He sido un libertino y me permití todas las intimidades
con el mundo
Tenías fe porque no llegó a tiempo
A tu edad
Tío
Eras un lindo muchacho y tocabas muy bien la trompeta a
pistón
Eso fue lo que te perdió como se dice vulgarmente
Te gustaba tanto la música que preferías el zumbido de las
bombas a las sinfonías de los fracs negros
Trabajaste con alegres italianos en la construcción de una
vía férrea en los alrededores de Baghavapur
Animador
Eras el jefe de fila de tus compañeros
Tu buen humor y tu talento de orfeonista
Eras el preferido de las mujeres del campamento
Como Moisés aplastaste a tu jefe de equipo
Huiste
Durante doce años no tuvimos la menor noticia tuya
Y como a Lutero, un rayo te hizo creer en Dios
En tu soledad
Aprendiste el bengalí y el urlu para poder fabricar bombas
Te vinculaste a los comités secretos de Londres
en White-Chapel volví a encontrar tu rastro
Convicto
Tienes la vida circuncisa
A tal punto
Que siento ganas de asesinar a alguien a morcillazos para
tener la oportunidad de verte
Porque nunca te vi
Has de tener una larga cicatriz en la frente

En cuanto a mi cuarto tío
Era ayuda de cámara del general Robertson, el que luchó
contra los boers
Sólo de vez en cuando escribía cartas en estos términos:
Su Excelencia se ha dignado aumentarme 50 libras
O
Su Excelencia lleva a la guerra 48 pares de zapatos
O
Todas las mañanas le arreglo las uñas a Su Excelencia...
Pero yo sé
Que había ahí algo más
La tristeza
Y la añoranza de su país

Tío Juan, eres el único de mis tíos al que haya podido ver
Regresaste a la patria al sentirte enfermo
Tenías un gran cofre de cuero de hipopótamo siempre
cerrado con una cadena
Te encerraste en tu habitación para cuidarte
Tu rostro reflejaba un profundo dolor
Una larga barba
Hacía quince días que dormías
Y al inclinarme sobre ti
Despestaste
Estabas loco
Quisiste matar a la abuela
Te encerraron en el hospicio
Y allí fue donde te vi por segunda vez
Oprimido
Por la camisa de fuerza
Te impedían desembarcar
Y movías penosamente las manos
Como si fueras a remar
Trasvaal

Estaban en cuarentena y los horse-guards habían apuntado
un cañón al barco de ustedes
Pretoria
Un chino estuvo a punto de estrangularte
Tougela
Muere Lord Robertson
Regreso a Londres
El guardarropa de Su Excelencia cae al agua lo que te parte
el corazón
Mueres en Suiza en el asilo de alienados de Saint-Aubain
Tu criterio
Tu entierro
Allí te vi por tercera vez
Nevaba
Detrás de tu carroza fúnebre discutí con los sepultureros a
propósito de su propina
Solamente dos cosas amaste en este mundo:
Una cacatúa
Y las rosadas uñas de Su Excelencia

No hay esperanza
Y es necesario trabajar
Las vidas concentradas son las más densas
Tejidos estegánicos
Remy de Gourmont vive en el número 71 de la calle
Saints-Pères
Filagore o seizaine
“Si dos hombres se separan pueden encontrarse pero una
montaña jamás encuentra a otra montaña”
Dice un proverbio hebreo
Los precipicios se cruzan
Me hallaba en Nápoles
1896
Cuando recibí el “Petit Journal Ilustrè:
El capitán Dreyfus degradado ante el ejército
Mi quinto tío:
Soy chef en el Club-Hotel de Chicago
Tengo cuatrocientos mozos bajo mis órdenes
Pero no me gusta la cocina de los yanquis
Tomen nota de mi nueva dirección
Túnez etc
Amistades de la tía Adela
Tomen nota de mi nueva dirección
Biarritz etc.
Oh tío fuiste el único que nunca padeció la añoranza de su
país
Niza Londres Budapest Bermudas San Petersburgo Tokio
Menphis
Todos los grandes hoteles se disputan tus servicios
Eres un maestro
Has inventado una infinidad de dulces platos que llevan tu
nombre
Tu arte
Te das te vendes te comen
Nunca se sabe en dónde estás
No te gusta quedarte en ningún sitio
Según parece cuentas con una “Historia de la cocina a
través de todas las edades y en todos los pueblos”
En 12 vol. in-8º
Con el retrato de los más famosos cocineros de la historia
Conoces todos los acontecimientos
Siempre estuviste allí donde algo sucedía
Quizá estés en París
Tus menús
Son la nueva poesía

Ya todo eso no me interesa
Espero
La guillotina es la obra maestra del arte plástico
Su martinete
Movimiento perpetuo
La sangre de los bandidos
Los cánticos de la luz conmueven los campanarios
Los colores se desploman sobre la ciudad
Un afiche más grande que tú y yo
Boca abierta y aullante
En la que ardemos
Las tres muchachas ardientes
Hananie Mizaël y Azarie
Adam’s Express Cº
Detrás de la Ópera
Hay que jugar a dar vueltas carnero
A la oveja que pace
Mujer-trampolín
El juguete de la publicidad
¡En marcha!
“Simeón, Simeón”
París-adiós

¡Qué divertido!
Dan las horas
¡Quai-d’Orsay-Saint-Nazaire!
Un paso bajo la torre Eiffel -cerrar el pico- para caer en
las antípodas
Después se continúa

Las catapultas del sol asedian los trópicos irascibles
Rico peruano propietario de la explotación de guano de
Angamos
Se lanza la Acaraguan Bananan
A la sombra
Los hospitalarios mulatos
He pasado más de un invierno en esas islas afortunadas
El pájaro-secretario es un deslumbramiento
Bellas damas desbordantes
Se beben bebidas heladas en la terraza
Un torpedero arde como un cigarro
Una partida de polo en los campos de ananás
Y los manglares abanican a las jóvenes estudiantes
My gun
Un tiro
Un observatorio en la ladera del volcán
Grandes serpientes en el río seco
Campos de cactus
Rebuzna un asno la cola al aire
Una indiecita bizca quiere irse a Buenos Aires
Un músico alemán me pide prestada mi fusta con pomo de
plata y un par de guantes de Suecia
Ese gordo holandés es geógrafo
Jugamos a los naipes mientras se espera el tren
Es el aniversario de la Malasia
Recibo un paquete a mi nombre, 200.000 pesetas y una carta
de mi sexo tío:
Espérame en la factoría hasta la próxima primavera
Diviértete mucho bebe licores fuertes y no ahorres mujeres
Es el mejor remedio
Sobrino mío
Y aún había ahí algo más
La tristeza
y la añoranza de su país

Oh tío he esperado un año entero y no has venido
Te fuiste con una compañía de astrónomos que iban a
inspeccionar el cielo en la costa occidental de la
Patagonia
Les servías de intérprete y de guía
Tus consejos
Tu experiencia:
No había dos como tú para apuntarle al horizonte con el
sextante
Y los instrumentos en equilibrio
Electro-magnéticos
En los fiords de Tierra del Fuego
En los confines del mundo
Pescaban musgos protozoarios a la deriva entre dos aguas al
fulgor de los peces eléctricos
Coleccionaban aerolitos de peróxido de hierro
Un domingo por la mañana
Viste salir de las aguas un obispo con su mitra
Tenía una cola de pescado y te asperjaba con señales de la
cruz
Huiste a la montaña aullando como un vari herido
Esa misma noche
Un huracán destruyó el campamento
Tus compañeros debieron renunciar a la esperanza de
hallarte vivo
Cuidadosamente se llevaron sus documentos científicos
Y al cabo de tres meses
Los pobres intelectuales
Llegaron una noche a una fogata de gauchos donde se
hablaba justamente de ti
Salí en tu busca
Tupa
La hermosa naturaleza
Los padrillos se enculan
200 toros negros mugen
Tango argentino

Aunque ya no existan hermosas historias
“La vida de los santos”
“Das Nachtbuechlein von Schuman”
“Cymbalum mundi”
“La tariffa delle Puttane di Venegia”
“Navigation de Jean Struys”, Amsterdam, 1528
“Shalom Aleichën”
“Le crocodile de Saint-Martin”
Strindberg ha demostrado que la tierra no es redonda
Ya Gavarni había abolido la geometría
Pampas
Disco
Los iroqueses del viento
Salsa picante
La hélice de los retoños
Byrrh
Daily Chronicle
La ola es una cantera de la que el vendaval como un
escultor arranca trozos para tallar
Cuadrigas de espuma que tascan el freno
Eternamente
Desde el comienzo del mundo
Silbo
Un airecillo que se quiebra

Mi séptimo tío
Nunca se supo qué fue de él
Dicen que me parezco a ti

Le dedico este poema
Señor Bertrand
Usted me invitó con licores fuertes para prevenirme de las
fiebres del canal
Usted se suscribió al “Argos de la Prensa” para recibir todos
los recortes que me concernieran
Último francés de Panamá (no llegan a 20)
Le dedico este poema
A usted barman del “Matachina”
Millares de chinos murieron donde hoy se alza el bar
resplandeciente
Usted destila
Usted se enriqueció enterrando a las víctimas del cólera
Envíeme la fotografía de la selva de alcornoques que crece
sobre las 400 locomotoras abandonadas por la empresa
francesa
Cadáveres vivientes
La palmera injertada en la canasta de una grúa cargada de
orquídeas
Los cañones de Aspinwall picoteados por los tucanes
La draga de las torgutas
Los pumas guarecidos en el gasómetro desfondado
La exclusa perforada por los peces-sierra
La tubería de las bombas tapada por una colonia de iguanas
Los trenes detenidos por la invasión de las orugas
Y el ancla gigantesca con las armas de Luis XV cuya
presencia en la selva no supo explicarme
Todos los años cambia las puertas de su establecimiento
cubiertas de firmas
Todos sus clientes
¡Qué testimonio esas 32 puertas!
Lenguas vivientes de ese sagrado canal que usted ama tanto

Esta mañana es el primer día del mundo
Istmo
Desde donde simultáneamente se ven todos los astros del
cielo y todas las formas de la vegetación
Preexcelencia de montañas ecuatoriales
Zona única

Todavía existe el vapor de la Almidón Paterson
Las iniciales en colores de la Atlantic Pacific Tea Trust
En Los Ángeles Limited que parte a las 10.02 h para llegar
tres días después y que es el único tren del mundo
con vagón-peluquería
El Trunk los eclipses y los cochecitos de niños
Para que aprenda a deletrear el ABC de la vida bajo la
férula de las sirenas de las partidas
Toyo Kisen Kaïsa
Tengo queso y pan
Un cuello limpio
La poesía data de hoy

La vía láctea alrededor del cuello
Los dos hemisferios a la vista
A toda velocidad
Ya no hay desperfectos
Si tuviera tiempo de hacer algunos ahorros tomaría parte
en el rallye aéreo
He reservado un asiento en el primer tren que cruzará el
túnel bajo la Mancha
Soy el primer aviador que atraviesa el Atlántico en
monoplaza
900 millones

Tierra Tierra Aguas Océanos Cielos
Tengo la añoranza de mi país
Soy todos los rostros y los buzones me dan miedo
Las ciudades son vientres
¡Ya no soy los caminos
Las líneas
Los cables
Ni los puentes colgantes!

Soles lunas estrellas
Mundos apocalípticos
Todavía tenéis un hermoso papel que desempeñar
Un sifón estornuda
Los can-can literarios siguen su curso
Muy abajo
En la Rotonda
Como en el fondo de un vaso

YO ESPERO

Quisiera ser la quinta rueda del carro
Tempestad
Peras en el olmo
Ser nada y estar en todo

París y sus suburbios
Saint-Cloud, Sévres, Montmorency,
Courbevoie, Bougival, Rueil, Montrouge,
Saint-Denis, Vincennes, Étampes, Melun,
Saint-Martin, Méreville, Barbizon,
Forges-en-Bière.

Junio 13 de 1914


Otros poemas de BLAISE CENDRARSaquí
Prosa del Transiberiano y de Jehanne de Francia / Panamá o las aventuras de mis siete tíos
Versión: Enrique Molina
Ediciones del Mediodía,1968
Imagen: nb.admin.ch

Blaise Cendrars: Prosa del Transiberiano y de la pequeña Juana de Francia

 Pros del Transiberiano, Antología El poeta ocasional



Dedicada a los músicos 


En aquel tiempo yo era un adolescente
Apenas tenía dieciséis años y ya no recordaba mi infancia 
Estaba a 16.000 leguas del lugar de mi nacimiento
Me hallaba en Moscú,
en la ciudad de los mil tres campanarios y las siete estaciones
Y no me bastaban las siete estaciones y las mil tres torres
Porque mi adolescencia era tan ardiente y loca
Que mi corazón, alternativamente,
ardía como el templo de Efeso o como la Plaza Roja de Moscú                     
Cuando se pone el sol.
Y mis ojos iluminaban antiguos senderos.
Y yo era tan mal poeta
Que no sabía llegar hasta el fondo de las cosas.
El Kremlin era como una inmensa torta tártara
Crujiente de oro.
Con las grandes almendras de las catedrales
inmensamente blancas
y el oro empalagoso de las campanas...
Un viejo monje me leía la leyenda de Novgorode
Yo tenía sed
Y descifraba caracteres cuneiformes
Luego, de pronto, las palomas del Espíritu Santo volaron sobre la plaza
y también mis manos alzaban el vuelo, con  susurros de albatros
 y esto era las últimas reminiscencias del último día
Del postrer viaje
y del mar.
No obstante, yo era un poeta muy malo.
No sabía llegar al fondo de las cosas.
Tenía hambre
Ya todos los días ya todas las mujeres en los cafés ya todas las copas
                                                            
Habría querido beberlas y romperlas
Ya todas las vitrinas ya todas las calles
Ya todas las casas ya todas las vidas
Ya todas las ruedas de los coches que giraban
como torbellinos sobre los malos empedrados
Habría querido hundirlas en un gran horno de espadas
y habría querido moler todos los huesos
Y arrancar todas las lenguas
y licuar todos esos grandes cuerpos extraños
y desnudos bajo la ropa que me vuelve loco..
Presentía la llegada del gran Cristo rojo de la revolución rusa…
Y el sol era una inmensa herida que se abría como un brasero.
En aquel tiempo yo era un adolescente
Apenas tenía dieciséis años y ya no recordaba mi nacimiento
Estaba en Moscú, donde quería alimentarme de llamas
y no me bastaban las torres y las estaciones que cubrían mi ojos de estrella
En Siberia rugía el cañón, había guerra
A Hambre frío peste cólera
y las aguas fangosas del Amor arrastraban millones de carroñas
                                                         
En todas las estaciones veía partir todos los últimos trenes
Ya nadie podía salir porque no se vendían más boletos
Y los soldados que se iban hubieran preferido quedarse...
Un viejo monje me cantaba la leyenda de Novgorode.
Yo, el mal poeta que no quería ir a ninguna parte, podía ir a todos lados
Y también los comerciantes todavía tenían dinero suficiente                                                  
Para ir a intentar hacer fortuna.
Su tren salía todos los viernes de mañana.
Se decía que había muchos muertos.
Uno llevaba cien cajas de despertadores y cucús de la Selva Negra
Otros cajas de sombreros, cilindros y un surtido de tirabuzones de Sheffield                                     
Otros ataúdes de Malmoe llenos de latas de conservas y sardinas en aceite
También había muchas mujeres
Mujeres entrepiernas en alquiler que también podían usarse
Ataúdes
Todas pagaban impuestos
Se decía que había muchos muertos allí 
Ellas viajaban con tarifa reducida
Y todas tenían una cuenta corriente en el banco. 
Pues bien, un viernes de mañana me llegó la hora por fin 
Estábamos en diciembre
y también yo partí para acompañar al viajante joyero que iba a Jarbín
                                                                        
Teníamos dos asientos en el expreso y 34 cofres de joyería de Pforzheim
Pacotilla alemana «Made in Germany» 
Me había vestido de punta en blanco, y al subir al tren se me perdió un botón 
                                                         [
- Lo recuerdo, lo recuerdo, a menudo pensé en ello desde entonces-
Yo dormía sobre los cofres y me sentía muy contento
de poder jugar con la browning  Niquelada que también me había dado
Me sentía muy feliz despreocupado 
Creía jugar a los bandoleros 
Habíamos robado el tesoro de Golconda 
Y, gracias al transiberiano, íbamos a ocultarlo del otro lado del mundo
Yo tenía que defenderlo contra los ladrones del Ural
que habían atacado a los saltimbanquis de Julio Veme
Contra los Junguzes, los boxers de la China 
Y los rabiosos pequeños mongoles del Gran Lama 
Alibabá y los cuarenta ladrones 
Y los fieles del terrible Viejo de la montaña 
Ysobre todo, contra los más modernos 
Los rateros de hotel 
Y los especialistas de los expresos internacionales
Y sin embargo, y sin embargo 
Estaba triste como un niño 
Los ritmos del tren 
La «médula ferrocarrilera» de los psiquiatras americanos 
El ruido de las puertas de las voces de los ejes rechinando sobre los rieles congelados 
Ell ferlín de oro de mi futuro 
Mi browning el piano y los juramentos de los jugadores
de  cartas en el compartimento de al Iado «
La deslumbrante presencia de Juana 
El hombre de anteojos azules que se paseaba nerviosamente
por el corredor y me miraba al pasar 
Murmullos de mujeres  
Y el silbido del vapor
Y el eterno ruido de las ruedas locas en los carriles celestes 
Los vidrios están escarchados 
¡La naturaleza no existe!
Y detrás, las llanuras siberianas el cielo bajo y las grandes sombras de los
Taciturnos que suben y bajan 
Estoy acostado sobre una manta de viaje 
Colorinche 
Como mi vida 
Y mi vida no me abriga más que esa manta  
Escocesa 
Y toda Europa entrevista por el parabrisas de un expreso a toda máquina 
No es más rica que mi vida 
Mi pobre vida 
Esta manta
Deshilachada sobre cofres llenos de oro
Con los que viajo
Sueño
Fumo
y la única llama del universo
Es un pobre pensamiento...
Desde el fondo de mi corazón me brotan lágrimas
Si pienso, Amor, en mi querida;
Ella no es más que una niña, a quien encontré así
Pálida, inmaculada, en el fondo de un burdel.
No es más que una niña, rubia, risueña y triste,
No sonríe y nunca llora;
Pero en el fondo de sus ojos, cuando te deja beber en ellos,
Tiembla un dulce lis de plata, la flor del poeta.
Es dulce y muda, sin ningún reproche,
Con un largo estremecimiento cuando tú te aproximas;
Pero cuando yo voy hacia ella, por aquí, por allá, festivo,
Ella da un paso, luego cierra los ojos, y da un paso.
Porque es mi amor, y las otras mujeres
Sólo tienen vestidos de oro sobre grandes cuerpos llameantes,
Mi pobre amiga está tan desamparada,
Está toda desnuda, no tiene cuerpo, es demasiado pobre.
No es más que una flor cándida, endeble,
La flor del poeta, un pobre lis de plata,
Muy frío, muy solo, y ya tan mustio
Que me brotan las lágrimas si pienso en su corazón.
Y esta noche es similar a otras cien mil cuando un tren rasga la noche
                                                                        [
- Caen los cometas-
Y el hombre y la mujer, aún jóvenes, se divierten haciendo el amor.
El cielo es como la carpa desgarrada de un circo pobre
en un pueblito de pescadores
En Flandres
El sol es un quinqué humoso
Y en lo más alto de un trapecio una mujer representa la luna.
El clarinete la corneta una agria flauta y un mal tambor
Y aquí está mi cuna
Mi cuna
Siempre estaba cerca del piano cuando mi madre como
Madame Bovary tocaba las sonatas de Beethoven
Yo pasé mi infancia en los jardines suspendidos de Babilonia
y la rabona, en las estaciones frente a los trenes a punto de salir
                                                          
Ahora hago correr todos los trenes detrás de mí
Bale-Tombuctú
También jugué a las carreras en Auteuil y Longchamp París-Nueva York
 Ahora hago correr todos los trenes a todo lo largo de mi vida Madrid-Estocolmo
Y perdí todas mis apuestas
Sólo queda la Patagonia,la Patagonia, que convenga a mi inmensa tristeza,
la Patagonia, y un viaje por los mares del Sur
Estoy en camino
Siempre estuve en camino
Estoy en el camino con la pequeña Juana de Francia
El tren pega un peligroso salto y vuelve a caer sobre todas sus ruedas
El tren vuelve a caer sobre sus ruedas
El tren siempre vuelve a caer sobre todas sus ruedas
«Dime, Blaise, ¿estamos muy lejos de Montmartre?»
Estamos lejos, Juana, viajas desde hace siete días
Estás lejos de Montmartre, de la Butte que te alimentó del
Sagrado Corazón contra el cual te acurrucaste
París desapareció y su enorme fogata
No quedan más que las cenizas constantes
La lluvia que cae
La turba que se hincha
La Siberiaque gira
Los pesados manteles de nieve que ascienden
Y el cascabel de la locura que tintinea como un último deseo en el aire azulado
El tren palpita en el corazón de los horizontes plomizos
Y tu pena ríe burlona.,.
«Dime, Blaise, ¿estamos muy lejos de Montmartre?»
Las preocupaciones
Olvida las preocupaciones
Todas las estaciones agrietadas oblicuas sobre la ruta
Los hilos telegráficos de los que cuelgan
Los postes grotescos que gesticulan y los estrangulan
El mundo se estira se alarga y se retira como un acordeón
atormentado por una mano sádica
En las resquebraduras del cielo, las furiosas locomotoras
Huyen
y en los agujeros,
las vertiginosas ruedas las bocas las voces
y los perros de la desdicha que ladran a nuestras espaldas
Los demonios están desencadenados
Chatarras
Todo es un acorde falso
El «brun-run-run» de las ruedas
Choques
Rebotes
Somos una tormenta bajo el cráneo de un sordo...
«Dime, Blaise, ¿estamos muy lejos de Montmartre?»
Pero sí, me pones nervioso, bien lo sabes, estamos muy lejos
La locura recalentada ruge en la locomotora
La peste el cólera se alzan como brasas ardientes en nuestro camino
Desaparecemos en la guerra totalmente en un túnel
El hambre P.uto se aferra a las nubes en desbandada
y estiércol de las batallas en montones apestosos de muertos
Haz como él, haz tu oficio...
«Dime, Blaise, ¿estamos muy lejos de Montmartre?»
Sí, estamos muy lejos, estamos muy lejos
Todos los chivos emisarios reventaron en este desierto
Oye los cencerros de ese rebaño sarnoso Tomsk
Tcheliabinsk Kainsk Obi Taichet Verkné Udinsk Kurgán Samara Pensa-Tulún
La muerte en Manchuria
Es nuestro desembarcadero y nuestra última guarida
Este viaje es terrible
Ayer por la mañana
Iván Ulitch tenía los cabellos blancos
y Kolia Nicolai Ivanovitch se roe los dedos desde hace quince días...
Haz como ellos la Muerte el Hambre haz tu oficio
Cuesta cinco francos, en transiberiano, cuesta cien rubIos
Afiebra los bancos y enrojece bajo la mesa
El diablo está en el piano
Sus nudosos dedos excitan a todas las mujeres
La Naturaleza
Las Busconas
Haz tu oficio
Hasta Jarbín...
«Dime, Blaise, ¿estamos muy lejos de Montmartre?»
Pero... vete al diablo... déjame tranquilo
Tienes caderas angulares
Tu vientre es agrio y tienes blenorragia
Eso es todo lo que París puso en tu regazo
También un poco de alma... porque eres desdichada
Tengo piedad tengo piedad ven hacia mí sobre mi corazón
Las ruedas son los molinos de viento de Jauja
 Y los molinos de viento son las muletas que hace girar un mendigo
Somos los lisiados del espacio
Rodamos sobre nuestras cuatro heridas
Nos cortan las alas
Las alas de nuestros siete pecados
y todos los trenes son los baleros del diablo
Corral
El mundo moderno
La velocidad no tiene la culpa
El mundo moderno
Las lejanías están demasiado lejos
y al final del viaje es terrible ser un hombre con una mujer...
«Dime, Blaise, ¿estamos muy lejos de Montmartre?»
Tengo piedad tengo piedad ven a mí te contaré una historia
Ven a mi cama
Ven a mi corazón
Te contaré una historia...
¡Oh ven! ¡ven!
En Fidji reina la primavera eterna
La pereza
El amor extasía a las parejas en la hierba alta
y la sífilis ronda bajo los bananeros
¡ Ven a la islas perdidas del Pacífico!
Se llaman Fénix, Marquesas
Borneo y Java
y Célibes con forma de gato.
No podemos ir al Japón
¡ Ven a Méjico!
En sus altiplanicies florecen los tulipaneros
Las lianas tentaculares son la cabellera del sol
Se hablaría de la paleta y los pinceles de un pintor
Colores fragorosos como gongs,
Allí estuvo Rousseau
Allí deslumbró su vida
Es el país de los pájaros
El pájaro del paraíso, el ave lira
El tucán, el sinsonte
Yel colibrí anida en el corazón de los lirios negros
¡Ven!
Nos amaremos en las majestuosas ruinas de un templo azteca
Tú serás mi ídolo
Un ídolo abigarrado infantil un poco feo y extrañamente raro
¡Oh ven!
Si quieres iremos en aeroplano y volaremos sobre el país de los mil lagos,
Allí las noches son desmesuradamente largas
el antepasado prehistórico tendrá miedo de mi motor
aterrizaré
Y construiré un hangar para mi avión con los huesos fósiles de mamut
                                     
El fuego primitivo recalentará nuestro pobre amor
Samovar
Y nos amaremos muy burguesmente cerca del polo
¡Oh ven!
Juana Juanita Ninita nita tetita ninón
Mi chiquita mi cosita mi tesoro mi Perú
Arroró gurrumina
Pompón mi bombón
Mi preferida corazoncito
Nenita
Querida gatita
Mi lindo pecadito
Chuchita
Cucú
Se durmió
Se durmió
Y no se engulló ni una sola de todas las horas del mundo
Todos los rostros vislumbrados en las estaciones
Todos los relojes
La hora de París la hora de Berlín la hora de San Petesburgo
y la hora de todas las estaciones
Y en Ufa, el rostro ensangrentado del artillero
Y la esfera tontamente luminosa de Grodno
Y el eterno avance del tren
Todas las mañanas se ponen en hora los relojes
El tren adelanta el sol atrasa
No le hace, oigo las sonoras campanas
La enorme campana de Notre-Dame
La campaneta agridulce del Louvre que convocó la San Bartolomé
Los carillones enmohecidos de Brujas la Muerta
Las campanillas eléctricas de la biblioteca de Nueva York
Las campanas de Venecia
Y las de Moscú, el reloj de la Puerta Roja
que me contaba las horas cuando estaba en una oficina
Y mis recuerdos
El tren retumba en las placas giratorias
El tren rueda
Un gramófono gutural iza una marcha gitana
y el mundo, como el reloj del barrio judío de Praga, gira locamente al revés
                                               
Deshoja la rosa de los vientos
Ya zumban las tormentas desencadenadas
Los trenes ruedan en torbellino sobre las redes enmarañadas Baleros diabólicos
Hay trenes que nunca se encuentran
Otros se pierden en el camino
Los jefes de .estación juegan al ajedrez
Chaquete
Billar
Carambolas
Parábolas
la vía férrea es una nueva geometría
Siracusa
Arquímedes
y los soldados que lo degollaron
y las galeras
y las naves
y los prodigiosos artefactos que inventó
y todas las matanzas
La historia antigua
La historia moderna
Los torbellinos
Los naufragios
Hasta el del Titanic que leí en el diario
Otras tantas imágenes-asociaciones que no puedo desarrollar en mis versos
Porque todavía soy un poeta muy malo
Porque el universo me desborda
Porque no me preocupé por asegurarme contra los accidentes de tren 
 Porque no sé ir hasta el fondo de las cosas
y tengo miedo.
Tengo miedo
No sé ir hasta el fondo de las cosas
Como mi amigo Chagall podría hacer una serie de cuadros dementes
                                                                  
Pero no tomé notas de viaje
«Perdónenme la ignorancia
Perdónenme no conocer ya el antiguo juego de los versos»
Como dice Guillaume Apollinaire
Todo lo que se refiere a la guerra puede leerse en las Memorias de Kuropatkin
                                            
O en los diarios japoneses que están tan cruelmente ilustrados
Para qué documentarme
Me abandono
A los sobresaltos de mi memoria...
A partir de lrkutsk el viaje se hizo demasiado lento
Demasiado  largo
Nosotros estábamos en el primer tren que rodeaba el lago Baikal
Habían adornado la locomotora con banderas y farolitos 
Y dejamos la estación con los tristes acentos del himno al Zar
Si yo fuera pintor vertería mucho rojo, mucho amarillo en el final de este viaje
Pues en verdad creo que todos estábamos un poco locos
Y que un inmenso delirio ensangrentaba
las nerviosas caras de mis compañeros de viaje
Cuando nos acercábamos a Mongolia
Que retumbaba como un incendio.
El tren había disminuido su marcha
Y en el perpetuo rechinamiento de las ruedas percibía
Los acentos locos y los sollozos
De una liturgia eterna.
He visto
He visto los trenes silenciosos los trenes negros que volvían          
del Lejano Oriente y que pasaban como fantasmas
y mi ojo, como el fanal de popa, aún corre tras esos trenes
En Talga agonizaban 100.000 heridos por falta de cuidados
Visité los hospitales de Krasnoiarsk
y en Jilok nos cruzamos con un largo convoy de soldados locos
En los lazaretos vi llagas abiertas heridas que sangraban a rabiar                                                 
los miembros amputados danzaban en derredor
o alzaban el vuelo en el aire ronco
El incendio se hallaba en todas las caras en todos los corazones
Dedos idiotas tamborileaban sobre todos los vidrios
y bajo la presión del miedo todas las miradas
reventaban como abscesos                                                   
En todas las estaciones quemaban todos los vagones
y he visto
He visto trenes de 60 locomotoras que huían a todo vapor
perseguidas por los horizontes en celo y bandas de cuervos
que alzaban el vuelo desesperadamente tras ellos
Desaparecer
En dirección de Port-Arthur.
En Tchita tuvimos algunos días de respiro
Detención de cinco días debido a la obstrucción de la vía
Los pasamos en casa del Señor Yankelevitch
que quería darme a su hija única en matrimonio
Luego volvió a partir el tren.
Ahora me había instalado yo en el piano y me dolían los dientes
                                                                        
Cuando quiero vuelvo a ver ese interior tan tranquilo el
negocio del padre y los ojos de la hija que de noche venía a mi cama
                                                         
Mussorgsky
Y los lieder de Hugo Wolf
Y las arenas del Gobi
Y en Jailar una caravana de sombreros blancos
Realmente creo que estaba ebrio durante más de 500 kilómetros
Pero estaba en el piano yeso es todo lo que vi
Cuando se viaja habría que cerrar los ojos
Dormir
Hubiera deseado tanto dormir
Reconozco todos los países con los ojos cerrados por su olor
y reconozco todos los trenes por el ruido que hacen
Los trenes de Europa son de cuatro tiempos mientras que los
de Asia son de cinco o siete tiempos
Otros van en sordina son canciones de cuna
Hay algunos que por el ruido monótono de las ruedas
me recuerdan la pesada prosa de Maeterlinck
He descifrado todos los textos confusos de las ruedas y   
reunido los elementos dispersos de una violenta belleza
Que poseo
y que me acosa.
Tsitsikar y Jarbín
No voy más lejos
Es la última estación
Me apeé en Jarbín cuando acababan de prender fuego a las
oficinas de la Cruz Roja    
Oh París
Gran hogar cálido con los tizones entrecruzados de tus calles
y tus viejas casas que se inclinan sobre ellas
 y se recalientan Como abuelas
y aquí hay anuncios, rojo verde multicolores como mi pasado en suma amarillo
Amarillo el arrogante color de las novelas de Francia en el extranjero
                                                              
Me gusta frotarme con los ómnibus en marcha en las grandes ciudades
Los de la línea Saint-Germain
-Montmartre me llevan al asalto de la Butte
Los motores mugen como los toros de oro
Las vacas del crepúsculo pastan en el Sagrado Corazón
Oh París
Estación central andén de las voluntades encrucijada de las inquietudes
Unicamente los droguistas aún tienen un poco de luz sobre su puerta
La Compañía Internacional de Wagons-Lits y de los
Grandes Expresos Europeos me envió su prospecto
Es la iglesia más hermosa del mundo
Tengo amigos que me rodean como pretiles
Cuando parto tienen miedo de que no vuelva más
Todas las mujeres que conocí se alzan en los horizontes
Con los gestos lastimosos y las miradas tristes de los semáforos bajo la lluvia
Bella, Inés, Catalina y la madre de mi hijo en Italia
y aquélla, la madre de mi amor en América
Hay gritos de sirena que me parten el alma
Allá lejos en Manchuria un vientre se estremece todavía como en un  parto
Querría
Querría no haber hecho nunca mis viajes
Esta noche me atormenta un gran amor
Ya pesar mío pienso en la pequeña Juana de Francia.
Fue en una noche de tristeza cuando escribí este poema en honor
                                                                       
Juana
La pequeña prostituta
Estoy triste estoy triste
Iré al «Conejo ágil» a recordar mi juventud perdida
y tomar unas copitas
Luego volveré solo


París
Ciudad de la Torre única del gran Patíbulo y de la Rueda
París, 1913

Poeta, novelista y ensayista francés. Su verdadero nombre era Sauser-Hall. Nació en La Chaux-de-Fonds, de padre suizo y madre escocesa, y obtuvo la nacionalidad francesa tras la I Guerra Mundial. Abandonó pronto sus estudios y viajó por Europa, Rusia y Asia, desempeñando diversos oficios. Blaise Cendrars fue ante todo poeta y en 1909 publicó La leyenda de Novgorod, y más tarde Pascua en Nueva York (1912), y el famoso Prosa del transiberiano y de la pequeña Juana de Francia (1913). Al igual que Apollinaire, despreciaba los poemas breves por lo limitado de su alcance y creó un estilo nuevo basado en la sucesión de impresiones, temas y sentimientos en los que la nostalgia y la desilusión se combinan con una visión cósmica del mundo. En 1914 ingresó en el ejército francés y sirvió en el cuerpo de voluntarios extranjeros. En 1915 perdió la mano derecha tras ser alcanzado por una granada. Su talento lírico quedó entonces destruido y hasta 1926 sólo escribió ensayos sobre pintores, relatos y una Anthologie nègre (1921). Este sentimiento de pérdida se observa también en El oro (1925), su primera novela. Moravagine (1926), una novela surrealista publicada un año más tarde, marcó su regreso a la violencia narrativa y fue al mismo tiempo una expresión autobiográfica de su vida aventurera. Blaise Cendrars fue también un aventurero de las formas literarias y un innovador de la ficción y el ritmo sincopado. Sus cuatro novelas más importantes, El hombre fulminado (1945), La mano cortada (1946), Bourlinguer (1948) y Le Lotissement du ciel (1949), demuestran que su autor entendía la literatura como una conquista del yo. Recibió la Legión de Honor y la Medalla Militar. En 1961, el mismo año de su muerte, fue galardonado con el Gran Premio Literario de la Villa de París.
Fuente: http://www.literaberinto.com/vueltamundo/minibiocendrars.htm

Blaise Cendrars


Sao Paolo Railway C°




El rápido está levantando presión
Nos instalamos en un Pullman pompeyano que se asemeja a los
.....confortables vagones de los ferrocarriles egipcios
Estamos en torno a una mesa de bridge en anchos sillones de
....mimbre
Hay un bar en el extremo del vagón donde tomo el primer café
....de Santos
Al partir nos cruzamos con un convoy de vagones blancos que
....llevan esta inscripción
Caloric Cy
Qué va
Me ahogo



Escribir




Mi máquina golpea ritmicamente
Suena al cabo de cada línea
Los engranajes producen sonidos guturales
De tanto en tanto me recuesto en mi sillón de junco y suelto una
......gran bocanada de humo
Mi cigarrillo está siempre encendido
Entonces escucho el ruido de las olas
El gorgoteo del agua estrangulada en la cañería del lavabo
Me levanto y baño mi mano en el agua fría
O me perfumo
Tapé el espejo del armario para no verme escribir
El ojo de buey es una rodaja de sol
Cuando pienso
resuena como la piel de un tambor y habla fuerte



Adrienne Lecouvreur* y Cocteau




Compré otros dos titís pequeñitos
Y dos pájaros con plumas como de papel tornasolado
Mis monitos tienen pendientes
Mis pájaros tienen las uñas doradas
Bauticé al mono más pequeño Adrienne Lecouvreur al otro Jean
Dí un pájaro a la hija del almirante argentino que está a bordo
Es una joven tonta y que bizquea con ambos ojos
Le da un baño de pies a su pájaro para desdorarle las patas
El otro canta en mi camarote dentro de algunos días imitará todos
.....los ruidos familiares y sonará como mi máquina de escribir
Cuando escribo mis monitos me miran
Yo los divierto mucho
Se imaginan que me tienen enjaulado



BLAISE CENDRARS (Neuchatel, Suiza, 1887 / París, Francia, 1961
De Poesía Completa, Ediciones Librerías Fausto, 1975
*Adrienne Lecouvreur, actriz francesa del siglo XVIII
Imagen:www.directmatin.fr




¿Di, Blaise, estamos muy lejos de Montmartre?


Raymone et Blaise Cendrars par Irving Penn em http://www.hubpages.com/

Designed by OddThemes | Distributed by Blogger Template Redesigned by PRD